Salomé Pradas: "Podemos ser el hub de la nueva industria de la movilidad"

En un mundo hiperconectado gracias a las redes sociales y a la penetración de intenet en todos los órdenes de la vida, la vieja movilidad, la que permite el tránsito de las personas y las mercancías, no solo no ha pasado a mejor vida, sino que es protagonista absoluto de un movimiento creciente e incesante impulsado por la globalización. Carreteras, aeropuertos, ferrocarriles, puertos, los polígonos industriales o las necesarias áreas logísticas son algunos de los canales indispensables de la nueva movilidad.

Sobre la realid"d y futuro de esas infraestructuras ha debatido un amplio grupo de expertos que han formado parte del consejo local del primer Foro Económica y Social del Mediterráneo, organizado por Prensa Ibérica y, concretamente, por Levante-EMV. Dicho consejo, cuyas conclusiones se presentarán el 9 de mayo, está integrado por la consellera de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio, Salomé Pradas; la rectora de la Universitat de València (UV), Mavi Mestre; el rector de la Universitat Politècnica de València (UPV), José Esteban Capilla; el secretario general de UGT País Valencià, Ismael Sáez; la secretaria general de CC OO del País Valencià, Ana García Alcolea; el presidente de la CEV y vicepresidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Salvador Navarro; la presidenta de la Asociación de Empresarias y Profesionales de València (EVAP), Marta Iranzo; el secretario general de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), Diego Lorente; la presidenta de la APV, Mar Chao; el expresidente de Puertos del Estado y de la Autoridad Portuaria de Castellón y catedrático de Computación e IA de la Universitat Jaume I (UJI) con proyectos de digitalización de la gestión portuaria, Francisco Toledo; el presidente de la Autoridad Portuaria de Castellón, Rubén Ibáñez; el presidente de la Autoridad Portuaria de Alicante, Luis Rodríguez; el presidente de la Cámara de Comercio de València, José Vicente Morata; la CEO de Transfesa Logistic, Idoia Galindo; el director de Hidrógeno Verde en España y delegado Institucional de Iberdrola en la Comunitat Valenciana, Iban Molina; la directora de Educación y Conocimiento de la FundaciónRepsol, Arantza Hernanz; y la delegada territorial de Red Eléctrica para la Comunitat Valenciana y Murcia, Maite Vela.

Espacio económico

La infraestuctura clave en el desarrollo de ese espacio social y económico que es el mediterráneo español es el corredor, que, tal como se ha puesto de manifiesto en el citado consejo, «puede jugar como la palanca de cambio para una nueva perspectiva logística del espacio litoral» que conforman Andalucía, Murcia, Comunitat Valenciana, Cataluña y las Islas Baleares «en conjunción con puertos y aeropuertos». Un espacio para la conexión ferroviaria y por carretera que también contribuya a la descarbonización del transporte. Y a integrar un territorio básico en España con el resto del contienente europeo.

Como apuntó el secretario autonómico de Infraestructuras y Transporte, Vicente Dómine, «cuando hablamos del corredor mediterráneo nos referimos a un espacio de progreso de dimensiones nada desdeñables en el marco de España y de la Unión Europea. Hablamos de un espacio en donde viven más de 20 millones de personas, esto es el 40 % de la población española y cerca del 4,5 % del total de la población de Europa. Si fuera un páis, el corredor sería el sexto mayor de la Unión Europea. El producto interior bruto del corredor es superior al medio billón de euros, el 40 % del PIB español y el 3,5 % de la Unión Europea».

Corredor

En su opinión, el corredor «no puede avanzar si no se apoya en un corredor infraestructural y de transporte eficiente y de un marco regulatorio y de apoyo que supere los límites nacionales». «Necesitamos -añadió- una movilidad y una logística cada vez más frugal, que consuma menos recursos renovables y no renovables y que libere a las personas cada vez más de la desagradable y peligrosa tarea de la conducción». «Necesitamos un nuevo modelo de transporte ferroviario de mercancías y un gran impulso a la navegación de cabotaje», concluyó.

Como resultado de los debates producidos en el seno del consejo, sus integrantes dieron pie a la elaboración de un documento Dafo, que analiza las debilidades, las amenazas, las fortalezas y las oportunidades que conlleva el citado corredor mediterráneo. A continuación, se detallan las aportaciones que realizó a dicho informe la consellera de Medio Ambiente.

Dafo

Salomé Pradas considera que la inclusión del corredor mediterráneo como eje prioritario en el reglamento de las redes transeuropeas de transportes (RTE-T) «fue en su día un logro de toda la sociedad de la Comunitat Valenciana. Tras trece años de ser considerado como red básica, aún restan actuaciones por ejecutar para garantizar, al menos, la parte inicial del eje: la conexión en ancho internacional de Murcia con la frontera francesa».

La responsable de territorio en la Generalitat traza a continuación cuáles son, según su criterio, los puntos clave a la hora de elaborar un Dafo de la mencionada infraestructura y apunta como una de las principales oportunidades que generará la posibilidad de convertir a Valencia en un hub de la nueva industria de la movilidad, contando para ello con algunas bazas ganadoras, como la presencia en dicho territorio de tres empresas claramente tractoras, como son la ferroviaria Stadler, la automovilística Ford y Volkswagen, que ya ha empezado a construir en Sagunt su planta de baterías para el coche eléctrico, todo ello sin olvidar la potencia que supone contar con el puerto de València, líder en contenedores en el Mediterráneo.

Debilidades

En el capítulo de las debilidades, Pradas puso un ejemplo: «Para que las mercancías lleguen por ferrocarril a Europa desde la Vega Baja o la región de Murcia se deben acelerar las obras de la variante de Torrellano para que todo nuestro potencial agrario exportador pueda utilizar el ferrocarril y no se vea obligado al uso del transporte de carretera con lo que conlleva de sobrecoste, de consumo de derivados del petróleo y de una huella ambiental considerable».

Otro punto débil es que «las obras de las estaciones ferroviarias también deben experimentar un ritmo más ágil en su diseño y construcción. En 2024 está en obras la estación intermodal de Font de Sant Lluís, elemento clave para atender al puerto de València y conectarlo con el corredor mediterráneo».

La consellera considera que la «Generalitat Valenciana sí desarrolla la Estrategia Logística de la Comunitat Valenciana, que incluye cuatro grandes estaciones multimodales. La primera, Sagunt, ha sido recientemente licitada y las obras han comenzado en este mes de marzo».

Servicios

Pradas considera que «se debe ir trabajando en los servicios que van a a darse en el corredor mediterráneo a partir de 2026, la fecha que se baraja como final de las obras entre Barcelona, Valencia y Alicante. Si podremos tener cadencias de media hora en hora punta y si podrá implementarse el AVE regional, la conexión de las tres grandes áreas de la Comunitat Valenciana, incluyendo los servicios del aeropuerto de Alicante y la vecina Murcia».

La responsable de territorio e infraestructuras también detecta que en la red viaria también hay puntos de mejora. Y cita las congestiones de la V-30, el nexo de unión del puerto de València con la autopista A-7 y la falta de capacidad del «baipás», cuya ampliación ya se ejecuta. También, «tramos de la autopista AP-7 entre Castellón y Tarragona hacen imprescindible completar la A-7 desde el aeropuerto de Castellón hasta el límite de la provincia».

Amenazas

En cuanto a las amenazas, Pradas detalla las siguientes: «Las políticas de infraestructuras deben perseguir la eliminación de los grandes cuellos de botella de las redes viarias para dar una respuesta eficiente al transporte de mercancías por ferrocarril. En los grandes polos de intermodalidad para viajeros en la Comunitat Valenciana se deben abordar las obras necesarias para ejecutar las estaciones centrales de Valencia y Alicante. Para evitar demoras que afectan a la economía productiva y acumular retrasos en la mitigación de las emisiones de efecto invernadero».

Fortalezas

En el otro lado de la balanza, la consellera cree que «la empresa pública de transporte ferroviario (Renfe Mercancías) debe de dar paso a un nuevo panorama de operadores europeos integrados que nos permitan competir con la logística continental de Estados Unidos, China y la India».

Asimismo, considera que «necesitamos una nueva política de gestión de infraestructuras que conjuge la solidez técnica de Adif con una orientación mucho más clara al cliente y a la liberalización de los mercados de transporte. Los costes de intermodalidad derivados de la gestión de Adif son muy elevados, disuasorios para la mayor penetración del ferrocarril». Por último, recuerda que «la Generalitat desarrolla una estrategia logística para ayudar dentro de nuestras competencias en este asunto. La nueva terminal multimodal de Sagunt y el grupo de trabajo que tenemos con el puerto de Valencia van en esta dirección».

Oportunidades

Con la vista puesta en el futuro, Pradas apunta que «la elección del corredor mediterráneo no es Asia, ni Europa ni América, sino ser la charnela [bisagra]entre los tres espacios. Y sin olvidar el Magreb».

Además de apostar, como ha quedado dicho, por ser el hub de la nueva industria de la movilidad, la consellera destaca el «potencial humano y empresarial sólido anclado en la tradición pero que está también en la cresta de la ola de la innovación. Una receta perfecta para ser una pata esencial para el progreso de España».